Fuego en mi Piel
Me estoy quemando las manos,
con este fuego… muy lentamente!
Se me queman también mis venas
y mi piel se pierde, ardiendo de repente.
No existe nada en el mundo,
que pueda controlar este fuego.
Ni mi llanto… ni la lluvia, ni el viento
que le llevan a Dios mis ruegos.
El fuego en mi piel avanza,
más y más, como mi amor por ti.
No debe llegar a mi Corazón,
porque siempre has vivido ahí.
A pesar del fuego tan intenso,
que ha consumido toda mi piel.
Pude salvar a mi Corazón,
para que sigas viviendo en el…!